El extraño fenómeno apareció en una parcela de aproximadamente ocho hectáreas sembrada de trigo en Tula (Hidalgo), donde en una noche (del lunes 27 de febrero al martes 28) se formaron extrañas figuras geométricas perfectamente delineadas, figuras que asemejan laberintos y donde no fue cortado el trigo, sólo pareciera que pasó por encima algo misterioso que las aplastó para realizar las figuras.
Este fenómeno apareció también en un reciente programa de Tercer Milenio, de Jaime Mausán.
A mi estas formas en las cosechas me recuerdan mucho las que se produjeron en Kranodar (Rusia) en mayo de 2011.
Este fenómeno ocurre cuando se cultiva trigo o cebada en suelos con alto contenido en nitrógeno. La riqueza de nutrientes del suelo no hacen recomendable la siembra de estos cultivos, aunque la rotación en la siembra obliga a hacerlo de vez en cuando. Los tallos se debilitan tanto que la brisa acaba por tumbarlos.